La instancia organizada junto al Centro de Innovación Docente reunió a 20 alumnos y alumnas de la asignatura “Herramientas de Realidad Virtual Aplicadas”, quienes sostuvieron el primer encuentro con este tipo de tecnologías.
Con el fin de poner las tendencias del futuro al servicio de su formación académica, estudiantes del electivo “Herramientas de Realidad Virtual Aplicadas” de nuestra facultad, participaron de una entretenida actividad práctica en laboratorio RealiTec UDD.
La instancia consistió en que los alumnos y alumnas de segundo año tuvieran los primeros acercamientos con la realidad virtual y aumentada. Vivencia que les permitió no solo pasar un lúdico momento, sino que también desafiarse al utilizar esta tecnología para enfrentarse a sus fobias y finalizar con un taller de Mindfulness.
El profesor encargado del ramo, Sebastián González, explicó que “tuvieron una oportunidad de aprendizaje experiencial utilizando dispositivos (Oculu Quest 2 y HTC Vive Pro) y softwares de realidad virtual que pueden ser utilizados en la disciplina psicológica, pero esta vez los experimentaron desde el punto de vista del paciente/cliente/usuario. Hay quienes la calificaron como su mejor experiencia universitaria hasta el momento”.
Una de las estudiantes, Javiera Pezo, destacó la importancia de este tipo de clases prácticas. “Valoro mucho este tipo de enseñanzas, ya que sale del método habitual. Es mucho más motivante saber qué haremos algo nuevo y el aprendizaje experiencial siempre me ayuda mucho”, aseguró.
Otro de los protagonistas de esta experiencia fue Pablo Agusto, arquitecto de Experiencias Educativas dentro de RealiTec, que se encuentra bajo el alero de la sub-dirección del Centro de Innovación Docente, quien detalló cómo fue la organización de la actividad:
“Se vino planificando hace semanas con el profesor Sebastián. Revisamos las tecnologías y los softwares a aplicar. La idea es que estas herramientas, que en un momento fueron creadas para diversión, puedan ser aplicadas para el desarrollo del currículum del estudiante”, afirmó.
Cabe destacar que la terapia de exposición se basa en el modelo cognitivo conductual y está estrechamente vinculado a técnicas como la desensibilización sistemática, la reestructuración cognitiva y el aprendizaje inhibitorio y suele ser utilizado en tratamientos para la ansiedad, trastorno de estrés postraumático, fobias, trastornos de la conducta alimentaria, adicciones, entre otros.