Concepción.- El docente del programa de Magíster en Psicología Educacionalde la Universidad del Desarrollo dictará un taller llamado “Claves para promover la innovación en la educación” y por eso quisimos conocer la importancia que ha tomado ser creativo y fomentar las habilidades blandas en un área tan compleja como es el aprendizaje formal de miles de niños en nuestro país. Lee la a continuación esta entrevista.

La importancia de la innovación

–          ¿Desde cuándo la innovación se vuelve un aspecto tan importante para esta sociedad?

La pregunta es difícil, pues en las últimas décadas, con la irrupción de las nuevas tecnologías, estamos hablando de una sociedad completamente diferente. La sociedad donde yo fui estudiante no tiene nada que ver, con ésta en la que soy docente. La única certeza de este cambio de paradigma es que precisamente, todo va cambiando hacia un modelo que se está redefiniendo permanentemente.

Con esta lógica, vemos que el modelo educativo se ha quedado estancado en el siglo XIX y no responde a las necesidades reales de la sociedad actual. Y esto no sólo pasa en Chile, sino que es un fenómeno que se está viviendo a nivel mundial. Es por esto que la única herramienta que nosotros creemos que es válida es incorporar el factor de innovación, atreverse a explorar y, también, a equivocarse, que es parte de éste proceso.

–          ¿Por qué, si la educación es parte de la base de una sociedad, ha estado estancado por tanto tiempo?

Este estancamiento se debe a un problema de concepto. La educación siempre ha tenido el concepto de “entregar contenido”, si bien son importantes, cada vez nos damos cuenta que estos contenidos tienen una vida más breve. Hay contenidos que uno los ve en el colegio o en la universidad y que cuando se enfrenta a la vida laboral, no tienen ningún uso o validez. Esto es cada vez más frecuente.

Se necesita un proceso de educación continua, pero el que existe actualmente, pone énfasis en los contenidos, en vez de en las “habilidades blandas”, que sí tienen larga duración. Estas habilidades hoy son altamente demandadas por las empresas: que sean proactivos, que sepan aprender y “desaprender”, trabajar en equipo, tolerar el trabajo, y eso no se enseña, a pesar de que hoy esto tiene más valor.

–          ¿Cómo van de la mano el aprendizaje, la innovación y nuevas tecnologías?

Van de la mano de manera indisoluble. Son las nuevas tecnologías las que han empujado a esta sociedad al nivel de desarrollo actual. Esta misma velocidad de transformación, requiere que la educación, enseñe innovación, no sólo la aplique, sino que sea una disciplina que los estudiantes deban aprender.

En educación todo se puede mejorar. Existen cientos de brechas que deben ser estudiadas, pero no tan sólo las que uno sabe que no funcionan, sino que también revisar aquéllas que sí funcionan, como, por ejemplo, los recreos… ¿quién dice que deben durar 15 minutos?

El sistema se ha perpetuado porque resulta práctico, pero esto ya fue en el siglo XIX.

MPE: profesionalizante y práctico

–          ¿Por qué un psicólogo o un profesor debería estar interesado en la innovación?

Porque la gente debe darse cuenta que manejando ciertas herramientas puede ser realmente alguien innovador, ya que la innovación está vinculada con la creatividad, y las personas tienen muchos prejuicios con su propia creatividad. Muchos se bloquean en esta área. El MPE, en este sentido, es una tremenda herramienta, ya que ha actualizado sus contenidos, incluyendo esta área que permite al estudiante ver la educación desde una perspectiva más real y acorde a lo contingente.

La idea es lograr que se piense diferente frente a problemas cotidianos.

–          ¿Por qué te llamó la atención participar en la docencia del MPE?

El Magíster en Psicología Educacional tiene una malla muy profesionalizante. Su enfoque es práctico, y mi experiencia en innovación se ha dado en instituciones que buscan la práctica de la innovación, por lo que calzó perfecto con mis intereses.

Para mí, enseñar la teoría de la innovación, no tiene ningún sentido. Fui docente once años en España, por lo que me pareció una buena oportunidad seguir poniendo en práctica y aplicando mis conocimientos de innovación.