Cerca de 70 nuevos psicólogos UDD obtuvieron su título profesional el día lunes 12 de noviembre en la Universidad del Desarrollo. En esta oportunidad, el Premio de Excelencia UDD lo recibió María Jesús Ihnen por su desempeño académico.
Representando a los egresados, Catalina Karmy, dio el discurso de cierre de esta jornada. Compartimos sus palabras y ¡felicitamos a todos nuestros nuevos psicólogos UDD!
«Hace casi 6 años, en nuestro primer día, participamos de la clásica actividad de bienvenida: “digan su nombre, edad, y por qué decidieron estudiar psicología”. Aún no sabíamos qué esperar de la carrera, la universidad, o nuestros compañeros, pero nuestras respuestas fueron bastante parecidas: “quiero ayudar a las personas”, “soy bueno escuchando”, o “me interesa entender por qué actuamos como lo hacemos”.
Creo que el día de hoy, en nuestra ceremonia de titulación, muchos podemos decir que no teníamos idea de lo que la carrera nos deparaba. Y es que, ciertamente, cuando se trata del quehacer de un psicólogo, las creencias populares son muchas. ¿Cuántas veces hemos escuchado que nos digan..?: “¿me estás analizando?”, “no te puedes enojar si eres psicóloga”, y el clásico de los clásicos: “los psicólogos están todos locos”.
Creo que, si algo hemos aprendimos durante nuestros años de carrera, es que la psicología no se trata jamás de interpretaciones al azar. Aprendimos que es una ciencia que hay que poner en práctica con responsabilidad, ética y disciplina, una ciencia que nos enfrenta a problemas que no se resuelven con cálculos o predicciones, sino adentrándose con paciencia y constancia en la subjetividad de las personas, y entendiendo que somos meros facilitadores de un cambio que se gesta lenta y trabajosamente, pero que cuando se logra, transforma la vida no de una, sino de muchas personas.
Aunque tuvimos que memorizar fármacos, trastornos, autores, teorías y una infinidad de tabulaciones para el Rorscharch, estudiar psicología es desafiante de una manera muy distinta a otras carreras: te obliga a reflexionar constantemente, entender que no hay una sola respuesta para un problema, que somos seres enormemente complejos, que una simple causalidad lineal probablemente no será la explicación, que somos parte de sistemas, dentro de sistemas, dentro de sistemas aún mayores, y eso es solo el punto de partida para entender lo integral que cualquier intervención debe ser.
Ciertamente tuvimos que poner a prueba nuestra creatividad; ya fuera en clínica, educacional, organizacional, comunitaria, o en el ámbito deportivo, nos vimos pintando con niños, inventando juegos para futbolistas, generando desafíos para entrevistas grupales, o incluso trabajando emociones en la interación con animales. Si algo es seguro, es que las posibilidades de cambio son tan ilimitadas como lo sea nuestra imaginación.
Mirando hacia atrás, no podemos dejar de agradecer a nuestros profesores, directivos y administrativos, quienes nos enseñaron a confiar en el potencial de las personas, a cuidar de nosotros mismos para poder cuidar de otros y, sobre todo, a desenvolvernos en esta carrera, que es nuestra vocación, con la mayor dedicación y compromiso posible.
Tuvimos la suerte de ser parte de una generación llena de compañerismo y alegría, a la que no podría sentirme más honrada de representar el día de hoy. No es fácil simular una entrevista de trabajo frente a toda la clase, o recibir a un paciente en la sala de espejo, frente a la mirada de todos tus compañeros. Supimos entregarnos un espacio seguro para equivocarnos, aprender, y alegrarnos en comunidad de nuestros avances y logros.
Estoy segura de que nos adentraremos al mundo laboral teniendo las herramientas para llevar a cabo cualquier desafío que nos propongamos, y el apoyo que entrega toda una generación de nuevos colegas de la psicología.
Vivimos en un mundo que gira en torno a la productividad, la eficiencia, las ganancias, las ventas, y lo material. Nosotros estamos aquí porque queremos poner el foco en la felicidad, la salud, el vínculo y la comunidad.
Salgamos a hacer del mundo un lugar mejor».
¡Muchas felicidades a todos!