La apertura de los establecimientos educativos en 2022 estuvo inmerso en un nuevo contexto con problemas de convivencia escolar y salud mental tanto en estudiantes, profesores y asistentes tras superar el periodo de COVID-19. A raíz de estas situaciones, el Ministerio de Educación (Mineduc) formó un Consejo Asesor para la Convivencia escolar, Bienestar y Salud Mental, el que contó con la participación de uno de los investigadores y docente de la Facultad de Psicología de la Universidad del Desarrollo.
La misión del Mineduc fue crear un Plan de Reactivación Educativa a través de “Seamos Comunidad” al mando del ministro de Educación, Marco Ávila. En el marco de este trabajo se creó el Consejo Asesor formado por 17 profesionales de diversas áreas, uno de ellos fue Jorge Varela, investigador del Instituto de Bienestar Socioemocional (IBEM) UDD.
“Hay un desafío gigante en mejorar la calidad y equidad, demandas históricas del sistema. Un segundo elemento tiene que ver con recomponer el tejido, no sé si social, pero sí apoyar emocionalmente a las familias que lo pasaron mal durante la pandemia. Otro elemento que enfatizaba en la mesa era el bienestar del docente. Y por último, es resolver aquellos casos que tengan criminalidad o los hechos de violencia y agresión”, afirmó el Varela.
Además, el director del Laboratorio de Convivencia UDD, afirmó que ser parte del análisis beneficia a la Universidad del Desarrollo: “Es valioso que la Facultad sea un actor que participe en este tipo de discusiones. La incidencia del Mineduc hace mucho eco en cómo uno ve la política de convivencia escolar, centrada por ejemplo en temas de bienestar y desarrollo socioemocional. Algo que viene siendo un eje estratégico de nuestra Facultad hace mucho tiempo”.
Cabe destacar que el Consejo Asesor contó con once sesiones, tanto presenciales como virtuales, entre marzo y diciembre de 2022. Además de una Secretaría Técnica a cargo del equipo de Mineduc colaborando con la sistematización del trabajo en cada reunión.
El Ministerio de Educación recibió más de 60 recomendaciones, 53 de ellas con un enfoque a la priorización curricular para relevar las habilidades transversales que son fundamentales para desarrollar las competencias ciudadanas necesarias para una buena convivencia, junto a crear y fortalecer los espacios de diálogo según se expone en el escrito.