En el capítulo de ¿Qué Comes? (TVN) del día 21 de mayo, el Dr. Jaime Silva, Director del CARE, fue entrevistado extensamente acerca de los patrones alimentarios problemáticos y sus consecuencias para la epidemia de obesidad. En este contexto, el Dr. Silva se refirió al rol de regulación afectiva que tiene la alimentación en personas con sensibilidad al estrés. Específicamente, describió cómo la alimentación permite estabilizar la afectividad en personas que tienen emociones negativas recurrentes. Al respecto, profundizó en los diferentes tipos de familia y la relación que se establece con las conductas alimentarias problemáticas.
En las familias negligente e indulgente el mayor problema de conducta alimentaria es lo que se llama “alimentación externa”, es decir niños que debido a la presencia de alimentos y la falta de control y regulación parental desarrollan problemas de peso. La familia autoritaria es frecuente que de origen a la “alimentación emocional”, es decir a personas que se sobrealimentan para regular emociones negativas. Interesantemente en este tipo de familias, el niño o niña suele sobrealimentarse en respuesta a emociones negativas como la ansiedad, especialmente cuando no están los adultos presentes. También en la familia autoritaria es común la aparición del “patrón dietante crónico” donde la restricción (en busca de una imagen ideal) se combina con la sobreingesta por estrés (patrón de regulación). Interesantemente, la familia respetuosa, que combina la exigencia y el control en acuerdo a las necesidades y límites del niño es la que resulta en un factor protector contra los problemas de peso.
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